Mensaje de Vassula Escribo esto, hoy 25 de enero, el último día de la semana de la unidad. Tenemos que continuar enfocándonos y orando por la unidad y la reconciliación, porque esto es el mensaje principal de la Verdadera Vida en Dios. ¿Recuerdan cómo hace algunos años Jesús me hizo la siguiente pregunta: “¿Cuál Casa es más importante, tu casa o Mi Casa”? La respuesta que le di fue: “Tu Casa, Señor”. “Revive Mi Casa, embellece Mi Casa y une Mi Casa…”. Esta fue Su petición; este es el Mensaje de la VVED.
Desde entonces, todos trabajamos arduamente para seguir Sus Instrucciones y traer a la vida a las almas que estaban espiritualmente muertas, llevándolas de regreso al Rebaño, uniéndolas con Jesús. Hemos trabajado duro para reunir a las diferentes Iglesias para construir el Cuerpo de Cristo y vivir una unidad en la diversidad, dándole al mundo y a todas las Iglesias, el mensaje de que la unidad es posible. Reunir alrededor de 21 a 24 Iglesias, en cada una de nuestras peregrinaciones, es obra de Dios. Las Escrituras dicen que debemos trabajar juntos para continuar construyendo el Cuerpo de Cristo, y embelleciéndolo “ a fin de que trabajen en la perfección de los santos en las funciones de su ministerio, en la edificación del Cuerpo de Cristo” (Efesios 4,12). La unidad de las Iglesias sanará y consolidará la Iglesia, trayendo Paz al mundo. Al reconciliarnos unos con otros, nos reconciliamos con Dios también, para que podamos hacer que Él evite o disminuya el Castigo de Fuego que ya es ahora tan inminente.
Por medio del Poder Divino, Él se acercó a nosotros para permitir que podamos conocerlo y entenderlo, llevando a cada alma a una verdadera devoción y a un verdadero amor por Él. Nos confió Sus Mensajes Divinos en un tiempo en que Satanás está tentando al mundo, para lograr un cisma más profundo, para caer más profundamente en el vicio, la perversión, el odio, la corrupción y la división. Ha entrado a la Iglesia, entre sus pastores, para dividirlos de manera que unos estén contra otros, debilitando así a la Iglesia y lo que Ella representa. Este es el trabajo de Satanás antes del retorno de Cristo. Me recuerda cuando Cristo me explicó donde y cómo quería Él que yo le sirviera. Me dijo, con gran tristeza en Su Voz, que me mandaría a un mundo que lo rechazaría, lo azotaría, lo escupirían y lo volverían a crucificar. El mundo corroído y apóstata de la actualidad.
He estado tratando de descubrir y entender lo que el Señor quiere de mí en estos días. El impulso que pone en mí, en estos días, es recordarle a todos que Su Regreso es inminente y que el mundo sufrirá mayores tribulaciones. Me record que debemos continuar orando las dos oraciones que nos dio, una el 13 de noviembre de 2006, y la otra el 28 de noviembre de 2009.
La Tierra Se Sacudirá y Se Moverá de Su Sitio
El 18 de febrero de 1993, el Señor nos dio una advertencia. Dijo que si el mundo continuaba pecando y no se arrepentía, y si la Iglesia permanecía dividida, caerían problemas, problemas, problemas sobre la tierra y sobre toda la gente del mundo.
El 7 de enero de 2008, nuestra Madre Bendita nos dio un mensaje muy severo, diciendo que estábamos muy cerca de los eventos predichos por nuestro Señor para la humanidad, y que ya estaban a nuestras puertas: eventos catastróficos que son atraídos por la apostasía del mundo, la división de la Iglesia y la falta de amor. No se escucha arrepentimiento por parte de este mundo malvado. Estos acontecimientos son el resultado del rechazo a la Palabra de Dios y del rechazo a Dios Mismo, de la falta de arrepentimiento. El odio de la humanidad, su hipocresía y ateísmo traerá sobre nosotros el Fuego de Dios. Nuestra Madre Bendita dijo que la tierra está en peligro y sufrirá con fuego, que la ira de Dios ya no podía ser detenida por más tiempo y que caería sobre de esta generación porque la humanidad se rehúsa dejar de pecar. Dijo que la Misericordia de Dios, durante todos estos años, condujo tantas almas como fue posible a Él, extendiendo Su Brazo para salvarlos, pero solamente pocos comprendieron y escucharon. Que Su Tiempo de Misericordia ya no duraría mucho y que el tiempo estaba llegando en el que todos seríamos probados, y la tierra escupiría de sus entrañas ríos de fuego y que la humanidad entendería que miseria y su impotencia sin Dios en sus corazones. Ella dijo que Dios es firme y fiel a Su Palabra.
El tiempo ha llegado en el que la casa de Dios será probada y aquéllos que rechazaron Su Misericordia probarán el Fuego de Dios. Con respecto a los que han permanecido fieles a Dios, Ella dijo que el juicio que vendrá con fuego no será tan severo sobre de ellos, pues en su espirítu estarán gozando del llamado de Dios que los condujo a la vida.
Pero este no es el único mensaje que me ha sido dado sobre cómo el mundo sufrirá si no hace las paces con Dios y se arrepiente. Hay varios mensajes y visiones del fuego que vendrá pronto sobre nosotros. Este es un extracto del Mensaje del 18 de febrero de 1993:
(…) El sexto sello está a punto de romperse (Ap 6,12) y todos vosotros seréis sumidos en las tinieblas, y no habrá ninguna iluminación porque el humo expulsado desde el Abismo será como el de un inmenso horno que oscurecerá el sol y el cielo (Ap 9,2); y, debido a Mi Copa de Justicia, voy a haceros semejantes a serpientes y víboras, haré que os arrastréis sobre el vientre y comáis polvo (Gn 3,14) en esos días de tinieblas. Os aplastaré contra el suelo para recordaros que no sois mejores que las víboras… Vais a sofocaros y ahogaros en vuestros pecados. (Esto muestra que, de alguna manera, la gravedad de la tierra cambiará). ¡En medio de Mi furor, voy a pisotearos, voy a aplastaros con Mi ira! ¿Lo veis? Mis cuatro ángeles están ahora en pie alrededor de Mi Trono, esperando con inquietud Mis órdenes. Cuando oigáis el retumbar de truenos y veáis destellos de relámpagos, sabed que ha llegado la Hora de Mi Justicia. La tierra se sacudirá y, como una estrella fugaz, se moverá de su sitio (Is 13,13), arrancando montañas e islas de sus lugares; naciones enteras serán aniquiladas.
El cielo desaparecerá, igual que un pergamino que se enrolla (Ap 6,14) como lo viste en tu visión, hija(el 21 de julio de 1990)(En una visión me vi mirando a través de una ventana. Era de día. De repente la tierra comenzó a temblar violentamente bajo mis pies. El suelo subía y bajaba. El terremoto era de escala ocho y no cesaba. Miré al cielo desde la ventana y observé que perdía luminosidad. Miraba al cielo mientras éste se iba oscureciendo por momentos, hasta hacerse totalmente de noche. Entonces, vi caer las estrellas; o mejor, como si se desplazaran velozmente desde el este hacia el oeste del horizonte. Parecía que estaban desapareciendo de los cielos. Después, el temblor cesó y sobrevino una oscuridad amenazadora. Me di cuenta de que yo tenía una tenue luz en mi habitación. Miré por la ventana, pero sólo había unas tres o cuatro casas que tenían luz en toda la ciudad.)
Una gran angustia se abatirá sobre todos los ciudadanos. ¡Y ay del incrédulo! Escúchame: si los hombres te dicen hoy: “Ah, pero el Viviente tendrá Misericordia de nosotros, tu profecía no es de Dios sino de tu propio espíritu”, diles: “Aunque se os considereis vivos, estáis muertos. Vuestra incredulidad os condena. Porque os negasteis a creer en Mi tiempo de Misericordia, y prohibisteis que Mi Voz se propagara a través de Mis portavoces para advertir y salvar a Mis criaturas, moriréis también como los malvados. Cuando llegue la Hora de las Tinieblas, os mostraré vuestro interior. Volveré vuestra alma al revés, y cuando la veáis tan negra como el carbón, no sólo experimentaréis una desolación como nunca antes, sino que os golpearéis el pecho con angustia, reconociendo que vuestra propia oscuridad es mucho peor que la oscuridad que os rodea. (Esto muestra cómo nos juzgaremos a nosotros mismos desde nuestra conciencia, la iluminaicón de las conciencias, como lo llamamos). (…) Así es como manifestaré Mi Justicia a las naciones, y todas las naciones percibirán Mi sentencia cuando llegue esa Hora. Haré que la vida humana escasee más que nunca. Luego, cuando Mi ira se aplaque, estableceré Mi Trono en cada uno de vosotros, y juntos, con una sola voz, y un solo corazón, y una sola lengua, me alabaréis a Mí, el Cordero.
Basta por hoy, Vassula Mía. No te muestres hostil con tu propio pueblo, ni tampoco aflijas, alma, tu corazón. Yo te mostraré al mundo como una señal de unidad. Te contradicen y te rechazan, pero ahora ya sabes por qué: porque la unidad no es bien recibida, como el Amor no es acogido en muchos corazones. Falta sinceridad…. Ven. ¿Nosotros? Sí, mi Señor.
A continuación se encuentran las dos oraciones que Nuestro Señor pidió oraramos.
13 de noviembre de 2006 Oración de Arrepentimiento y Liberación El Señor dijo: Vassula Mía, la paz esté contigo; me encanta cuando vienes a Mí de este modo; cuando hables en Mi Nombre, que la congregación de fieles se consagre a Mí; que se arrepientan ante Mi con estas palabras: Señor,me has soportado todos estos años con mis pecados, pero a pesar de ello has tenido compasión de mí; me he descarriado en todos los aspectos, pero ahora no quiero pecar más; Te he agraviado y he sido injusto; ya no lo seré nunca más; renuncio al pecado, renuncio al demonio, renuncio a la iniquidad que ensucia mi alma; libera mi alma de todo lo que es contrario a Tu santidad; Te suplico, Señor, que me salves de todo mal; ven ahora, Jesús; ven ahora a habitar en mi corazón; perdóname, Señor, y permíteme descansar en Ti, porque Tú eres mi Escudo, mi Redentor y mi Luz, y en Ti confío; desde hoy, Señor, Te bendeciré en todo momento; rechazo el mal y a todos los demás dioses e ídolos, porque Tú eres el Altísimo por encima del mundo entero, trascendiendo de lejos a todos los demás dioses; con Tu Poderoso Brazo, sálvame de la mala salud, sálvame de estar cautivo, sálvame de los conflictos y derrota a mi enemigo el demonio;¡ven pronto en mi ayuda, oh Salvador! Amén.
El 28 de noviembre de 2009: El Señor dijo: dirígete a Mí, Vassula, de esta manera:
Padre Tierno,no descargues tu ira sobre esta generación, no sea que perezca por completo; no descargues sobre Tu rebaño la aflicción y la angustia, porque las aguas se secarán y la naturaleza se marchitará; todo sucumbirá ante tu irasin dejar huella tras de sí. ¡el ardor de Tu Aliento inflamará la tierra transformándola en un yermo! desde el horizonte se verá una estrella; la noche será asolada y las cenizas caerán como la nieve en invierno, cubriendo a Tu pueblo como fantasmas; ten Piedad de nosotros, Dios, y no nos evalúes duramente. ¡acuérdate de los corazones que se regocijan en Ti y Tú en ellos! ¡acuérdate de Tus fieles y no dejes que Tu Mano caiga con fuerza sobre nosotros! antes bien, por Tu Misericordia, levántanos e implanta Tus preceptos en cada corazón. Amén. cuando censure a esta generación, mi cólera arderá contra los apóstatas; puedo perdonar sus delitos y sus pecados, pero aún hay que hacer grandes reparaciones;
Ahora el Altísimo ha proclamado Sus Palabras una vez más y el Veredicto anunciado dependerá de vuestras oraciones, generación, de vuestras obras de misericordia, de vuestro amor y de vuestro compartir;
Queridos amigos, tratemos más arduamente de complacer y seguir las instrucciones de Dios, y como el siempre dice, nos diría hoy también: “no teman”…
En Cristo, Vassula |