“Queridos amigos: el mundo necesita ser evangelizado desesperadamente . Cristo dice «vayan y cristianicen a una sociedad descristianizada«. Por esto, el próximo mes de abril, hagamos todos un poco más por Jesús. Impriman un volante (a menos que ya tengan uno) con algunas palabras de Jesús y un número de teléfono o dirección de contacto. Tomen turnos haciendo el siguiente trabajo, o llamémosle servicio, para el Señor: dos veces por semana, durante un mes, vayan a un centro comercial donde la gente esté comiendo o bebiendo y distribúyanles el volante (…)”. Vassula, marzo de 2016
Recién a fines de abril pudimos hacer la impresión de los nuevos volantes, así que la campaña continuará en mayo y también en los meses siguientes. Podemos enviarles el diseño para que lo impriman y difundan en donde ustedes viven, lo cual incluye si es necesario modificarle los datos de contacto como hicimos ya con los hermanos de la VVeD en Montevideo, Uruguay.

Vassula sugirió que repartiéramos los volantes en los patios de comida pero nos aconsejó que no permaneciéramos allí si no nos dieran permiso: “Tal vez haya centros comerciales en los que esto esté prohibido, pero entonces traten de hacerlo de otra manera. Jesús dijo: hagan lo mejor que puedan y Yo haré el resto….”
Uno de nosotros lo intentó en un shopping pero no le permitieron hacerlo. Otros nos fuimos al Tigre donde la gente va de paseo y no es necesario pedir permiso. Los volantes fueron bien recibidos y casi no hubo rechazos. En especial fue muy lindo entregárselos a chicos y chicas adolescentes que paseaban por el lugar. Les decíamos; es un regalo y podés dárselo a tu mamá. No vimos que alguno lo tirara al suelo. También Pablo prefirió repartirlos en la vía pública en la zona de Pacífico y en Liniers, con muy buena aceptación. Lo hizo caminando por la calle y en los negocios a los cuales entraba. Adriana decidió repartir los volantes bajo la puerta en casas bajas, dejar algunos en los buzones de edificios y dejó bajo el limpia parabrisas de los autos estacionados en los barrios Retiro, Belgrano, Devoto y Palermo. También repartió en el tren pero no tuvo aceptación. Muy pocos lo tomaron en su mano.
Sofía nos compartió su experiencia ecuménica en el subte y en la calle:
Yo también empecé en el subte pero están los enfrascados en los teléfonos, entonces repartí por la calle caminando sobre todo por la calle Florida, que no usan tanto el teléfono porque se llevarían a la gente por delante. El 70% de la gente los aceptó, otros dijeron: no gracias. Una señora me dijo: yo soy católica, como vio a Jesús pensó que yo era evangélica (soy ortodoxa), y le dije está bien, es lo que pide el Santo Padre, la unidad de los cristianos y me lo aceptó sonriente y me pidió dos más.
Hugo decidió repartir los volantes en el tren y con muy buena recepción:
Les cuento que el martes pasado yendo al grupo de oración de Virreyes con Bessie en el tren (línea Mitre), empecé a repartir los volantes a lo largo de los vagones, la aceptación fue de más o menos 80 volantes, muchos pasajeros están enfrascados con el celular, otra parte dormita y el resto lee o simplemente mira. Entre los que aceptaron el volante al volver pude ver que estaban leyéndolo. Como experiencia les cuento que es conveniente que el tren no esté lleno, por lo tanto hay que ir en el sentido inverso de las horas pico. Hoy estuve en el ramal Urquiza (también repartí 80 volantes) y la experiencia fue similar. Ocurrió algo cómico, con el entusiasmo me pasé de la estación y aparecí en V. Lynch; me reí diciendo en vos alta que me había pasado, una chica joven a la que no le había dado el volante me lo pidió y me pregunto si pertenecía a una iglesia, esto permitió un pequeño dialogo de 2 ó 3 minutos en el cual pude explicar lo elemental y me bajé. Conclusión me parece que los medios de transporte es una forma posible, pidamos las gracias del Espíritu Santo para aquellos que reciben los volantes.
Este domingo salió con refuerzos. Nos relata:
“Nos encontramos con Marcela y Mili (5 años) en San Cayetano a las 10 am del miércoles 10, fuimos a la estación de Liniers y tomamos el tren a Moreno, se empezó a repartir los volantes en la estación y luego arriba del tren. La delantera la tomó Mili, nosotros íbamos casi corriendo detrás de ella y cubriendo los agujeros que dejaba, en algún momento nos sacó un vagón de ventaja; nos bajamos en Haedo. Cuando se acabaron los vagones tomamos otro tren hasta Castelar, luego volvimos a Liniers, se repartieron entre 180/200 volantes y se habló con algunas personas sobre los Mensajes y las charlas de evangelización. Por la tarde tuve que ir a cuidar a mis nietas, fuimos a la plaza y les conté lo que había hecho a la mañana con Mili y la mamá y me dijeron ¿nosotras podemos repartir?, les dije que por supuesto y repartieron otros 35 volantes; con los niños la aceptación es casi del 100 %.”

Quiera el Señor bendecirnos con nuevos lectores de Su Himno de Amor, que respondan a Su llamada a la intimidad con El, que Lo reconozcan como Su Señor, Amigo y Esposo fiel, lo amen, alaben e intercedan por muchas más conversiones en nuestra Argentina, por la unificación de las fechas de Pascua y por la unidad de los cristianos para que el mundo crea (Juan 17:21-23). Por eso necesitamos más voluntarios para repartir los volantes y muchas oraciones de aquellos que quieran acompañarnos.