«Honren a Mi Madre, que es también su Santa Madre» VVeD 10.02.88
– «Yo Soy. Vassula mía, la perseverancia debilita al demonio, disminuye el mal. Aprendan el Santo Rosario. Embellece Mi Iglesia».
VVeD 02.06.88
«En Su Vientre Inmaculado, Ella Me glorificó a Mí, recibiéndome, al Cordero sin mancha, haciendo un santuario para el Santuario. Ven y canta una nueva canción en Su Honor.» VVeD 25.03.1996
El rosario de las rosas lo conocimos en el IX Retiro Latinoamericano de la VVeD en Aparecida. Al iniciar cada Ave María, uno de los presentes colocaba un vasito con una hermosa rosa color salmón en una de las cuentas de un gran rosario con forma de corazón que se había dibujado al pie del altar. En el lugar de los Padrenuestros se colocó una rosa roja. Al finalizar se llevó en procesión la imagen de la Virgen, según la advocación de Aparecida, patrona de Brasil. para su veneración por parte de todos los presentes.
En este X Retiro Latinoamericano en Argentina se decidió reiterar la devoción bajo la advocación de la imagen de la Virgen de Guadalupe.

Espontáneamente se intercalaron entre cada misterio cantos al Espíritu Santo, como este muy querido entre los hermanos brasileños.

¡Dios mío, Dios mío!
¿Quién es ésta que se eleva como la aurora,
ecuánime en el crepúsculo
como la estrella de la mañana?
¿Quién es ésta más bella que la luna,
adornada con el sol
y una Puerta abierta de par en par en Su Corazón?
«Es la Reina del Cielo.
Es Mi Madre y Tu Madre,
la más hermosa de las mujeres,
bella como el Cielo,
radiante como Mi Gloria,
única en Su Perfección,
la Delicia de Mi Alma.
Es la Mujer
con las doce estrellas
sobre Su Cabeza como corona,
el Vaso de Mi Gloria,
un reflejo de Mi Eterna Luz.
Ella es aquella cuya Presencia
en Mis Cortes brilla más
que todas las constelaciones juntas.
Ella es el Vaso de la Luz Verdadera,
la Palabra
hecha carne y que vivió entre ustedes.
Ella es Gracia en la Gracia
y la más Dulce Canción
de los salmistas.
Ella es Mi Tema de Alegría,
Mi Honor y Mi Orgullo,
Ella es la Puerta del Cielo,
La que muestra a Sus hijos
cómo entrar en Mi Reino.
Ella es Mi Obra Maestra.
Ella es la Consoladora
de su Consolador,
Corredentora de su Redentor,
la Esposa de Mi Santo Espíritu».