Conclusiones de los ocho grupos en que se meditaron las promesas del Sagrado Corazón en los Mensajes de la Verdadera Vida en Dios,(25 de octubre de 1994;10 de octubre de 1988;10 de septiembre de 1990;16 de diciembre de 1989;11 de febrero de 1990; 22 de enero de 1990 ) en la reunión por zoom sobre las Advertencias y Promesas de Jesús, el 29 de mayo de 2021

- El Señor nos invita a permanecer en Su Amor. Debemos estar unidos a Jesús como el sarmiento está unido a la vid para tener vida. No olvidemos alabar al Señor, adorarlo, ser conscientes de Su presencia entre nosotros. La santidad no se dá de un día para el otro, por el contrario, es un camino y hay que perseverar en él.
- No debemos tener miedo del Señor. Debemos vivir los mensajes. Jesús y nuestro Padre Dios sufren por nuestros pecados. Pero Dios salvará a esta generación como lo hizo con Vassula. Pidamos la gracia de poder vernos como nos vé Dios, de ver nuestros pecados y poder arrepentirnos.
- Dios nos promete que, si nos dejamos amar por Él, seremos transformados en un reflejo de la imagen de Cristo. Mientras estemos aun moviéndonos en la tierra, podremos ya saborear y movernos en la corte Celestial entre los ángeles. Podremos abrazarnos con nuestra familia celestial como lo hizo Vassula.
- ¿Podemos ser un obstáculo para los planes de Dios? ¿Puede alguien tan pequeño ser un obstáculo para el Altísimo? Ciertamente no, debemos ser humildes, como niños, debemos entregar nuestro corazón a Jesús. Recibirlo en la Eucaristía equivale a recibir Su Sagrado Corazón. Esta Pandemia es por nuestros pecados, no es deseada por Dios, pero la permite, porque nos está dando la oportunidad de arrepentimiento, oportunidad de conversión.
- Además, El Señor es alegre, divertido; estamos llamados a ser alegres, transmitir esperanza. No es difícil, es entregarnos a Él todos los días.
- E- l Señor desea que seamos Su Eco como lo es Vassula. No debemos tener miedo. Él está siempre a nuestro lado y nos acompaña. Debemos hacer lo que está a nuestro alcance y Él completará lo que falte.
- Jesús es el Camino, la Verdad y la Vida. Dice el Señor: “Recibid, Mi Espíritu Santo, Él los acompañará y los transformará”. El Señor está deseosos que lleguemos al lugar que nos tiene preparado desde el principio de Su creación. No quiere que este lugar quede vacío. Recemos los unos por los otros para poder permanecer unidos al Señor.
- El Señor nos da Su Paz; permanezcamos en Su Paz. No dudemos de Su Amor. Él creó un plan para cada uno de nosotros; tenemos un lugar de privilegio.
- El hombre moderno rechaza a Dios y esto lo lleva a la desesperación, ansiedad, ataques de pánico. Cuanto más se aleja de Dios y de Nuestra Madre, más sufre.
- Y no olvidemos que el Amor volverá como amor.
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